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Del Evangelio de Mateo 21, 33-43, 45-46. (Adaptación)

Hace mucho tiempo, dijo Jesús:

«Había un agricultor que plantó una viña y se la dejó a cambio de dinero a otros agricultores y se marchó lejos. Llegado el tiempo de recoger los frutos, las uvas, fue a buscar los frutos que se estaban recogiendo. Pero los agricultores no querían dárselo y se enfadaron mucho. El dueño de la viña envió a su hijo pensando que le iban a hacer caso y no fue así. Se enfadaron mucho y le mataron. ¿Qué hará el dueño de la viña cuando vuelva? 

La gente le contestó: 

“Castigará a esos agricultores y buscará otros labradores que le entreguen los frutos”».

Historias de la Biblia: Los trabajadores de la viña

¡Ay qué lío con la viña! Todos quieren llenar sus manos de uvas como en la imagen que hemos visto. Todos quieren ser dueños de la viña. Y a veces a nuestros amigos, a nuestros vecinos, a nuestros amigos y a nosotros mismos, nos pasa lo mismo: queremos tener muchas cosas, decir a todos lo que hay que hacer… y no te escuchamos, Señor; no cuidamos lo que nos das. 

Jesús, ayúdame a ser como tú. 

Ayúdame a cuidar nuestro corazón y el de los demás. 

Ayúdame a tener paciencia y a aprender a escucharte para descubrir mi misión. Amén. 

Canto: Conviértete

Hoy voy a dar gracias a Dios por cómo soy.