28/03/2023
De corazón a corazón
28/03/2023
De corazón a corazón
Del Evangelio de Juan 13, 23
Uno de los discípulos, el que Jesús amaba, estaba reclinado a la mesa en el seno de Jesús.
¡Cuánto quería Jesús a san Juan! Tanto, que él era el discípulo amado, tenía tanta confianza con Jesús, que, en la Última Cena, pone su cabeza en el pecho de Jesús para que este le haga entender lo que es el perdón.
Juan en ese momento puede escuchar la respiración de Jesús, puede escuchar el latido de su corazón, como cuando yo descanso y abrazo a mis padres, con ese amor quiere Jesús que Juan descanse. Será este cariño de Jesús el que haga que Juan no le abandone en los momentos difíciles.
Yo también quiero escuchar tus latidos Jesús, quiero estar cerca de ti. Tú siempre estás, pero soy yo el que muchas veces me alejo de ti.
Señor Jesús, que nunca me aleje de ti, que nunca te abandone.
Gracias Señor por estar tan cerca de mí.
Amén.
Recuerda siempre que su amor y su misericordia son infinitos, incluso en las circunstancias más difíciles de la vida. No te separes de Él.