15/12/2022
Papeles secundarios… pero esenciales.
15/12/2022
Papeles secundarios… pero esenciales.
Del Evangelio de Lucas (7, 24-30):
Cuando se marcharon los mensajeros de Juan, Jesús se puso a hablar a la gente acerca de Juan: «¿Qué salisteis a contemplar en el desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? Pues ¿qué salisteis a ver? ¿Un hombre vestido con ropas finas? Mirad, los que se visten fastuosamente y viven entre placeres están en los palacios reales. Entonces, ¿qué salisteis a ver? ¿Un profeta? Sí, os digo, y más que un profeta. Este es de quien está escrito: “Yo envío mi mensajero delante de ti, el cual preparará tu camino ante ti”. Porque os digo, entre los nacidos de mujer no hay nadie mayor que Juan. Aunque el más pequeño en el reino de Dios es mayor que él».
Al oír a Juan, todo el pueblo, incluso los publicanos, recibiendo el bautismo de Juan, proclamaron que Dios es justo. Pero los fariseos y los maestros de la ley, que no habían aceptado su bautismo, frustraron el designio de Dios para con ellos.
Hola, Juan Bautista. Hoy mi oración va dirigida a ti. Reconozco que en mi vida generalmente pasas bastante desapercibido. Solo apareces en ocasiones puntuales, en Adviento, en Navidad…, y después es como si me olvidara de ti. Por eso, hoy quiero conocerte un poco más. En el Evangelio nunca se nos dice que hicieras milagros, pero siempre aparece que tu predicación y tu estilo de vida coherente y austero atraían a muchas personas. Y yo me pregunto: ¿de qué temas suelo hablar con mis amigos?, ¿mi estilo de vida es coherente con mis creencias?
También leo en el Evangelio que eran muchos los que, como signo de conversión, iban a que los bautizaras. Y es que tú hablabas mucho de la conversión, justamente porque el tiempo del Señor, el tiempo de Jesús, el Salvador, estaba a punto de llegar. Y yo, nuevamente, me pregunto: a diez días de la Navidad, ¿estoy viviendo este Adviento como un momento de conversión y de preparar mi corazón a la venida de Jesús?
Con todo esto me doy cuenta de que aunque siempre te mantuviste en un segundo plano, jugaste un papel esencial en la historia de Salvación que culmina con Jesús. Y es que muchas veces los protagonistas secundarios de una historia son esenciales para que la historia acabe bien (y si no, ¡que se lo digan a Sam en El Señor de los Anillos!)
Por todo esto y por mucho más:
Gracias, san Juan Bautista, por ser precursor de la verdad.
Gracias, san Juan Bautista, por allanar los caminos.
Gracias, san Juan Bautista, por recordarnos lo importante que es la conversión del corazón.
Gracias, san Juan Bautista, por ayudarnos a preparar nuestro corazón para la venida de Jesús. Amén.
Atraer a los demás hacia Jesús con mi estilo de vida sencillo y coherente.
