Del evangelio de Mateo 17,10-13. Adaptación.
Los amigos de Jesús no reconocieron a Juan y se quedaron tristes.
Señor Jesús, ¡a veces me cuesta mucho entender lo que me dices!
Me cuesta seguirte con todo mi corazón, con todas mis fuerzas
y hacer siempre lo que a ti te gusta.
Por eso, Jesús, hoy te pido que me ayudes a vivir como tú quieres, y a ver la luz cuando todo está oscuro, como en la imagen.
Ayúdame a amar como tú nos enseñas
y a seguir siempre tu camino con alegría.
Gracias, Jesús, por estar conmigo y por quererme tanto.
Amén.
Hoy hago silencio por la noche antes de dormir para poder escucharte.