7 abril, 2022
Miedos…
3. Reza
“Buscaban un falso testimonio”. ¡Qué fuertes estas palabras del Evangelio! En realidad, no tenían nada de lo que acusarte, Jesús, pero lo buscaban por todos los medios. Los jefes religiosos de Israel habían decidido acabar contigo y no sabían cómo. Lo intentaban de todas las maneras posibles: con falsos testimonios y mentiras, con calumnias, y retorciendo tus palabras, tus gestos, tus milagros, etc. Les resultabas muy incómodo. Se sentían amenazados. Tenían miedo a un cambio tan radical como el que Tú proponías: ¡la conversión como cambio de la mente y del corazón! Tenían miedo de una verdad que haría tambalearse demasiadas seguridades.
Señor, ¡cómo nos resistimos al cambio! ¡Con qué facilidad nos aferramos a nuestras seguridades! A nuestra idea de Dios, a nuestras ideas sobre los demás, a nuestro modo de ver la vida, de comportarnos, etc. Y si alguien se atreve a cuestionarnos, nos ponemos a la defensiva, nos resistimos y buscamos la manera de quitárnoslo de encima.
No permitas que se endurezca nuestro corazón. No dejes que el temor a perder nuestras seguridades nos cierre a tu novedad. Danos tu Espíritu Santo, para que infunda calor de vida en el hielo de nuestras resistencias y nuestros miedos.
Que así sea.
4. Compromiso
Hoy no voy a “condenar a nadie” y menos con falsedades.