Adaptación del Evangelio de san Mateo (Mt 1, 18-24)
María, madre de Jesús, estaba desposada con José el carpintero, y antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo.
A José, su esposo, se le apareció en sueños un ángel que le dijo: «José, no temas acoger a María, tu mujer, porque el bebé que hay en ella viene del Espíritu Santo. Dará a luz un hijo y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».
Cuando José se despertó, hizo lo que le había mandado el ángel del Señor y acogió a su mujer.
¿Cuántas pruebas necesitas para confiar en una persona? Nos cuesta confiar, contar algo importante sobre nuestra vida, pedir ayuda cuando nos sentimos solos. San José es ejemplo de fiel confianza en la Virgen María. Seguramente no fue fácil para él, pero confió en María para juntos formar una familia: la Sagrada Familia.
¿Cuántas pruebas necesitas para confiar en Dios? Seguro que si pensamos bien podemos encontrar muchas veces en las que Dios ha estado presente en nuestra vida, que muchas cosas no habrían sido posibles sin su ayuda.
Padre, que hoy seamos capaces de hacer como san José: confiar en los demás confiando primero en Ti, que no nos fallas ni nos abandonas jamás.
Amén.
Confía en tus amigos y familiares, porque juntos podéis ayudaros en aquello que os preocupa.